El 5 de junio fue el día mundial del Medio Ambiente.
Por Nora Leal Marchena
Por Nora Leal Marchena
En este momento tan especial que estamos atravesando hoy más que nunca debemos recordar algunas cosas que hacen al cuidado y respeto por el planeta en que vivimos.
Ya no se trata solo de la supervivencia de las especies, la tala de bosques, la contaminación de los océanos o el calentamiento global. Ni siquiera del mundo que dejamos a las futuras generaciones.
Ahora se trata de nuestra propia supervivencia. Eso que nos parecía un problema de otros y para el futuro, ya nos llegó.
Y estamos padeciendo las consecuencias, con desplazamientos poblacionales, terribles sequias, inundaciones, aire y agua contaminados, basurales, nuevas enfermedades, epidemias, y actualmente la Pandemia.
¿Cuánto de lo que nos ocurre puede atribuirse a la depredación humana? No sé si podemos mensurar la respuesta, pero sabemos que las consecuencias están a la vista.
El crecimiento indiscriminado de la población, con la invasión de urbanizaciones, basurales, minería, cría de ganado y cultivos intensivos en áreas donde los bosques y otros ecosistemas naturales garantizaban la biodiversidad está desapareciendo.
Y va llegando el día en que el Planeta se está agotando porque los recursos no son infinitos.
La Tierra es y ha sido generosa con sus recursos que distribuidos con equidad, cuidado y respeto puede abastecer a todos sus habitantes, pero nunca va a alcanzar para cubrir la codicia de unos pocos.